Without my car... vamos caminando

Parece mentira, pero como se acostumbra uno a lo cómodo... Me he quedado cuatro días sin coche, y me he encontrado como vendido. Yendo a trabajar en metro y luego autobus... A uno ya le faltaba la costumbre, y le ha recordado a su época universitaria... pero es que casi 2 horas desde que salgo de trabajar hasta que llego a casa se me han hecho pesadas.(no trabajo en la misma población)
Lo primero que joer... 20 minutitos andando hasta la boca del metro... antes lo tenía más cerca, me cago le leche...
Lo del metro, nada especial, ya que estoy acostumbrado a ello. Pero lo del autobus una hora, sin yo saber como colocarme en el asiento... que uno es pequeñito, pero nada una pierna aqui, otra allá... que agobio, la falta de costumbre, si hasta se me pone mal cuerpo....
En esas, que a la hora de comer, como no podía desplazarme mucho, uno de estos días me voy a comer un bocata al bar de mi con-cuñaaaaaaaoooo... Y me veo ahi en la barra de charla con un vejete y su chato de vino... "que se me han caido 20 euros... no señor, que son 20 céntimos... y con esas ale, tan amigos y de cháchara... Soltando mi faceta social (al pelao le puede recordar a los dos viejecitas de la parada del autobus).
Los días siguientes, durante la jornada laboral me las apaño con el coche de mi hermana, de mi hermano, hasta me cojo el camión y todo... En estas que voy con coche prestado, y al cruzar un puente, el autobus que viene enfrente me endiña en la parte de atrás..... joerrr (cómo jode cuando no es tu coche?... Afortunadamente es un arañazo y casi no se nota, pero te deja con cara de tonto. Todo el día con mi coche y para un rato que cojo otro....
Ayer ya me dieron el coche del taller, aunque me toca volver... Pero al menos he vuelto a la comodidad, y normalidad... Y es que lo que decía... uno se acostumbra y luego lo echa en falta (sobre todo por la noche al volver).
Y bueno, ya es viernes, veremos si este medio constipado que me he cogido me permite hacer algo por ahí... De momento me voy a buscar al vejete del vino... jejeje... Y luego, ya se verá...