A raíz de la eliminación de la selección española del mundial de fútbol de Brasil 2014 se están sucediendo las reacciones a lo largo y ancho del mundo. Y entre esos lugares que reaccionan también está la inefable Panamá, país de hondo raigambre, cuidada tradición balompédica y adalid de los derechos humanos.
Ya con el Marquesito y los suyos en el aeropuerto internacional Adolfo Suárez, podemos salir al paso de alguna de estas informaciones, como la del diario Crítica.
Ya con el Marquesito y los suyos en el aeropuerto internacional Adolfo Suárez, podemos salir al paso de alguna de estas informaciones, como la del diario Crítica.
¡Qué grandes! Hay que agradecer que ahora cuando busco en google: "Gilipollas critica a Panamá" no salgo yo sino Iker Casillas.
Hay un anécdota que se ha atribuido a Churchill y a unos cuantos más, aunque la primera vez que la oí se la achacaron a George Bernard Shaw. Se contaba que un día, mientras conversaba con uno de sus biógrafos, recogió en su buzón un sobre que le había enviado un remitente anónimo. Cuando extrajo el papel notó, sorprendido, que solo tenía escrita una palabra: “imbécil”. Entonces exclamó: “En mi vida he recibido muchas cartas sin firma, pero esta es la primera vez que recibo una firma sin carta". Aquí la tienen entre otros chascarrillos del escritor dublinés.
Así podría decir yo ahora que había leído muchas crónicas sin firma, pero es la primera vez que leo una firma sin crónica.
Cariñosamente a nuestros amigos panameños.
Así podría decir yo ahora que había leído muchas crónicas sin firma, pero es la primera vez que leo una firma sin crónica.
Cariñosamente a nuestros amigos panameños.
