Nos adentramos ahora en el mundo de la ginebra Oxley, un caro brevaje que se presenta en botella de a litro, al que en su destilación se le somete a no-sé-qué proceso en frío que hace que la producción diaria sea muy limitada y cara.
Pues bien, parte de esa producción nos la tomamos por la cara el otro día Pelaiwass y yo, con la ayuda de Carlitros y Miguelón II.
Esta ginebra además incorpora un buen mogollón de botánicos y alcanza los 47 grados alcohólicos. Me gusta esa moda de distribuir la ginebra en envases de litro. Esa costumbre de Pedro Giró para su ginebra parece haberla tomado Tanquerai para su Rangpur y ahora nos la encontramos también con Oxley.
La mezcla: Se enfría una copa balón, se añade el hielo y la ginebra Oxley y se incorpora la indian tonic con burbuja reducida, deslizándola por la cuchara. La innovación en este caso es añadirle un soplo de pomelo.
El resultado: Algo totalmente diferente a lo que habíamos tomado en otras ocasiones. El aroma del pomelo persistió, pero la burbuja desapareció sin dejar paradero. Aún así, un trago prometedor. El problema es que vendiéndola a casi 60 euros el litro, no es un trago que vaya a frecuentar, teniendo al alcance del bolsillo otras ginebras premium de primer nivel y con precios más competitivos.
Recordatorio: Decirle a D. Vito culoferro que añada algún artículo bajo los epígrafes "espiritualizantes" y "de gañote" con alguna otra rara ginebra que probara el otro día.