CHUZZ, PELADO, O DE FLANEURETTE Y EL DE BRUNETE

17 abril 2007

La carne de tu vieja se me pega entre los dientes

Los maoríes modernos son descendientes de los polinesios agricultores que colonizaron Nueva Zelanda allá hacia el año 1000 (hablamos de mineralismo...). Poco después, un grupo de maoríes colonizó, a su vez, las islas Chatham, 800 kilómetros al este, un archipiélago muy pequeño y de clima frío.

Poco a poco los maoríes que se establecieron en las pequeñas islas Chatham perdieron la conciencia de haberlo sido, pasando con el paso del tiempo a denominarse morioris. Los morioris abandonaron la agricultura, pues los cultivos tropicales maoríes no podían sobrevivir en su nuevo y frío hogar. Volvieron a ser, como antaño, cazadores-recolectores. Cazaban focas y capturaban pequeños crustáceos. Nada, viviendo al día, oiga. Dado que esta forma de vida no daba para producir excedentes de comida para su redistribución o almacenamiento, se fue creando una sociedad igualitaria, no apta para mantener ejércitos, burócratas, ni jefes. Al no haber ninguna isla cercana para colonizar, a los morioris no les quedó más remedio que aprender a soportarse los unos a los otros. Renunciaron a la guerra y redujeron el peligro de superpoblación castrando a algunos varones jóvenes. El resultado fue una población pequeña y no belicosa dotada de tecnología y armas sencillas, y sin liderazgo ni organización fuertes. A bastonazos con las focas.

Entretanto, los maoríes de la isla norte de Nueva Zelanda continuaron desarrollando el cultivo en su gran isla. A la sazón, Aumentaron en número llegando a ser más de 100.000, con poblaciones densas que periódicamente libraban feroces guerras entre sí. Con los excedentes de cultivo que almacenaban, podían alimentar artesanos especializados, jefes y soldados a tiempo parcial, su tecnología mejoró. Erigieron complejas edificaciones ceremoniales, e idearon mejores armas.

Y así se desarrollaron ambas sociedades, sin tener ningún contacto y perdiendo la conciencia de la existencia de la otra, a lo largo de los siglos, hasta que el 19 de noviembre de 1835 llegó un barco a las islas Chatham que transportaba a 500 maoríes provistos de armas de fuego, palos y hachas, a los que siguieron el 5 de diciembre 400 maoríes más. Un barco australiano de cazadores de focas les había dado noticia de una isla en la que abundaban los crustáceos y los peces, donde la población, unos 2.000 nativos, no tenía armas ni entendía de combatir.

Grupos de maoríes comenzaron a recorrer los asentamientos morioris, anunciando ahora que los nativos eran sus esclavos, y matando a quienes ponían objeciones. Los morioris tenían tradición de resolver sus conflictos de forma pacífica, por lo que decidieron en una junta no responder a los ataques, ofrecer la paz, la amistad, y la división de los recursos. Lo que se llama "alianza de las civilizaciones".

Aún así, los maoríes atacaron en masa sin escuchar la oferta, mataron a cientos de morioris, pasándolos a cuchillo, así, ris-ris, cocinando y devorando sus cuerpos, y esclavizando al resto. Ni alianza ni leches. En los años siguientes mataron a la mayoría de ellos según su antojo.


Esta historia la he aprendido leyendo el libro titulado "Armas, gérmenes y acero", obra de Jared Diamond, que es ese tipo de aquí abajo tan simpático. Por este libro ganó el premio Pulitzer en 1998. Es profesor de Geografía en la UCLA. Actualmente tiene 70 años, el chavalote.

12 comentarios:

Pitxi dijo...

Excelente historia que deberia hacernos reflexionar y mucho sobre determinados aspectos, dicen que hay que aprender de la historia, ya dijo Cicerón "No saber lo que ha sucedido antes de nosotros es como ser incesantemente niños".

Eso si chuso, los miercoles culturales son los miercoles ;), pero haremos una excepción esta semana, jejeje

Chuzz dijo...

Esto es como la revista "el jueves", que sale los miércoles...

O de FLANEURETTE dijo...

ya me diras si merece la pena el resto del libro, tiene muy buena pinta...

Anónimo dijo...

Chuso el de la foto es clavadito a ti pero dentro de unos 30 años ¿no sera familiar tuyo? alguno vallecano emigrante de EE.UU.

Aqui va una hitoria a cerca del patxaran que tanto le gusta al pitxi...


La Edad Media
El pacharán ya formó parte del menú servido en la boda de Gonofre de Navarra (1394 - 1428), hijo natural del rey Carlos III, quien en 1415 se casó con Doña Teresa de Arellano. También se sabe que la reina Blanca I de Navarra (1385 - 1441) tomó pacharán por sus propiedades medicinales cuando enfermó en el Monasterio de Santa María de Nieva en 1441.


Los tiempos modernos
El endrino se encuentra en estado silvestre por toda Europa, y recientemente (desde 1997 aproximadamente) se ha comenzado su cultivo domesticado en la geografía navarra. El Consejo Regulador del Pacharán Navarro es, desde 1988, el encargado de regular la elaboración, calidad y embotellado del pacharán, siendo el primer (y de momento único) organismo que certifica la correcta elaboración de este licor, amparando a las empresas adscritas a la Denominación de Origen del Pacharán Navarro, integrada en la Denominación de Productos Artesanos de Navarra.

Aunque son muchos los productores de este licor en Navarra, y su consumo en la comunidad foral es creciente, no es un licor excesivamente conocido en el resto de España, y escasamente referenciado en otros países. Amigos y conocidos han mencionado que, "cuando ellos hacían la mili" en lugares como Valencia o Madrid, el pacharán era conocido como "licor de Zoco", siendo esta una de las primeras marcas en "exportar" pacharán fuera de la comunidad foral.



Características

Características organolépticas
El pacharán navarro tiene que ser rojo o rosado intenso. Si aparece turbio o con posos significa que no se ha filtrado correctamente. El brillo es señal de juventud, y los tonos opacos de vejez. Ha de tener aroma intenso y afrutado y no se debe de notar el olor a alcohol.


Valores nutricionales y Medicinales
La endrina contiene vitamina C, es tónico, astringente y fortifica el estómago. Las flores del arbusto son diuréticas y suavemente laxantes cuando se utilizan como infusión. Estas son las propiedades medicinales del pacharán, que resulta ser bueno para: el estómago, aliviar los achaques de la vejez y prevenir la arterioesclerosis y el infarto. Además, actúa como sedante sobre el sistema nervioso.


Preparación
Se meten en un tarro o una botella, un cuarto de kilo de endrinas, orujo hasta tapar las endrinas, a ser posible maduras y el resto hasta llenar la botella anis dulce. Se cierra herméticamente y se deja macerar durante 7 u 8 meses en un sitio fresco y oscuro. Pasado este tiempo se filtra (con un tamiz si es posible) y se embotella. Hay quien añade en el periodo de maceración una hoja de laurel o un par de granos de café tostado, para darle un toque especial. Otros añadidos durante la maceración, muy utilizados en algunas regiones son unas flores de manzanilla o un palo de canela en rama.


Degustación
Es aconsejable tomarlo en copa o vaso de cristal y fresco (6-8ºC). Hay quien guarda la botella en el frigorífico o quien refresca la bebida con hielo, ya que da frescura en la boca con el aumento de agua al derretirse. No es recomendable añadirle hielo, ya que el exceso de agua reduce su sabor y puede resultar incluso desagradable.

Después de las comidas o cenas se puede disfrutar ampliamente de su aroma y sabor, por su acción digestiva, aunque cada vez se consume como copa de tarde o de noche. El pacharán no mejora con el tiempo, por lo que es recomendable consumirlo antes de que pasen dos o tres años desde su elaboración. Su sabor dulce invita a repetir, pero su consumo en exceso puede producir trastornos gástricos, además de una muy mala resaca.


Recetas Curiosas
Esta es una receta de para hacer gelatina de pacharán. Los ingredientes son:

1 sobre gelatina royal en polvo.(para medio litro),
375 cc de agua,
125 cc pacharán.
Preparación: Ponemos a hervir el agua, mientras tanto disolvemos la gelatina en el pacharán cuando está hirviendo, lo retiramos del fuego y añadimos el pacharán. 2 horitas en el frigorífico, y allí tenemos nuestra, en apariencia, inofensiva gelatina, con el alcohol del pacharán. Recomiendo servir con nata o algo así. Lógicamente está más suave por que lo hemos disuelto a 1/3 de su concentración original.


Combinado
Pese a que es un licor que tradicionalmente se consume solo, hay quien tiene a bien mezclarlo, sobre todo en fiestas populares. Los nombres citados a continuación, pese a no estar ni mucho menos reconocidos como cócteles o combinados por ninguna asociación de hostelería o de camareros, son los más conocidos en las fiestas de la geografía navarra.

Pacharán con Cava: San Fermín
Pacharán con naranja: Butano o butanito
Pacharán con limón: Pachalón
Pacharán con leche: Vaca-rosa
Pacharán con helado: Sorbete-rosa
Pacharán con zumo de frutas del bosque: Pacharán del bosque
Pacharán con gaseosa: Pacharánsete

Pitxi dijo...

Con tu permiso o sin el, cuelgo en un Post tu historia del Patxarán, ya que es bastante interesante ademas de que me interesa qe se sepa y divulgue entre los demas

muchas gracias silencioso, aunque a este paso te va a quitar el titulo Fernifunk

Chuzz dijo...

Desde luego, Silencioso, no has leído bien la historia si te piensas que el maorí de allí arriba vive en USA... aunque es cierto que se me puede parecer un poco a mi con 30 años más y con unos cuantos tatuajes en la jeta...

Anónimo dijo...

No extraña que los morioris murieran, con ese nombre... No debieron cambiarlo, los pobres.

O de FLANEURETTE dijo...

tio chuso, menos mal que no les has puesto la foto del "karembeu-noah", que les hubiera dado por decir que el ferni habia pasado por cambio-radical...

Chuzz dijo...

Pelao, La foto es muy buena, esa que dices... ya la pondré para ilustrar otro post.

Chuli, es cierto que el nombre es un poco cenizo, pero también tiene una sonoridad cadenciosa... Es una historieta muy curiosa.

María Paz Díaz dijo...

Si es que así es la vida, y cuando nos olvidamos, nos cortan el cuello ris-ris ;) :D

Chuzz dijo...

Ya te digo... ris-ris, toc-toc!

Pitxi dijo...

una verdad como un templo Color, y lo que duele no es el corte sino la perdida de inocencia